viernes, 7 de agosto de 2009

Heroes civiles del Peru


Túpac Amaru II

José Gabriel Condorcanqui era el descendiente de`` Túpac Amaru I´´, el último Inca de Vilcabamba, quien fue ejecutado en la plaza de Cuzco en 1572 por orden del virrey del Perú, Toledo.
José Gabriel `` Túpac Amaru´´ nació en Tinta, el 19 de marzo de 1738. Era el segundo hijo de Miguel Condorcanqui y de Rosa Noguera. A la muerte de su hermano mayor es el único heredero de las posesiones de Surimana, Tungasuca y Pampamarca. Es educado por los Jesuitas en el colegio de San Francisco de Borja situado en Cuzco.
En 1776, presenta una petición oficial para que los indios sean liberados del trabajo obligatorio en las minas. Frente a la negación de las autoridades de Lima, toma medidas más radicales. En 1780, se pone a la cabeza de la rebelión popular más importante de la historia del virreinato.
Los tributos excesivos, la "Mita" y los abusos de los Corregidores han sido las causas principales de la revuelta india que, en noviembre de 1780, estalló en el valle de Tinta. Durante esta rebelión, el Corregidor Arriaga fue hecho prisionero y ejecutado, por órdenes del jefe José Gabriel Condorcanqui, hijo de Miguel Condorcanqui y descendiente por parte de su madre de Túpac Amaru, el último soberano Inca, de quien adopta el nombre.
Aún si al comienzo el movimiento reconocía la autoridad de la corona de España, se transforma rápidamente en un movimiento independentista, luchando contra los abusos de los españoles.
Después de haber vencido una tropa de 1200 españoles en Sangarará, Túpac Amaru no se decide a marchar sobre Cuzco sino que regresa a su ciudad natal en Tungasuca. Desea negociar la paz, reconociendo que su objetivo no es la guerra contra los españoles sino terminar con los abusos de los Corregidores.
Eso les da tiempo a los españoles de organizar la resistencia y los rebeldes son vencidos una primera vez, el 8 de enero de 1781, por el ejército enviado por el virrey, y después entre el 5 y el 6 de abril en Tinta, por las tropas del Mariscal del Valle.
Perseguido por el general Ventura Landa en Tatanico, es tomado prisionero, juzgado, y el 18 de mayo de 1781, asiste al asesinato de toda su familia en la Plaza de Armas de Cuzco, así como de su esposa y consejera, Micaela Bastidas.
El juez Areche lo condena a morir descuartizado por cuatro caballos atados a sus cuatro miembros. Pero Túpac Amaru es un hombre robusto y sus verdugos no logran matarlo de esta manera. Se ordena entonces su decapitación.Su cuerpo es cortado en pedazos, su cabeza puesta sobre una lanza que se exhibe en Cuzco y Tinta, sus brazos son enviados a Tungasuca y Carabaya, y sus piernas, a Levítica y Santa Rosa.
A pesar de la ejecución de Túpac Amaru y su familia, los españoles no logaron apagar la rebelión que prosiguió bajo las órdenes de su medio hermano Diego Cristóbal, y que se extendió hacia el altiplano boliviano, la región de Jujuy y el noroeste de la Argentina.
El renombre de Túpac Amaru se hizo tal que los indios que se habían sublevado en la planicie de Casanare, en Nueva Granada, lo proclaman rey de América.
Siguiendo los pasos de sus predecesores que habían intentado encontrar una solución pacífica al conflicto, después de difíciles negociaciones, el nuevo jefe inca acepta bajar las armas en enero de 1782, con la promesa española de ser indulgente hacia los rebeldes y de hacer algo en cuanto a los problemas de los indios.
Las rebeliones criollas que siguieron tomaron la costumbre de invocar el nombre de Túpac Amaru a fin de obtener el apoyo de los indios.





Micaela Bastidas

Hija de Manuel Bastidas y Josefa Puyucahua, la joven Micaela era de esbelta belleza y clara tez mestiza, con el cabello ligeramente ondulado, lo que llevó a muchos a llamarla "zamba", nombre que se da en Abancay a las personas que por esta característica se distinguen de las personas típicamente andinas. Lo que más resaltan los historiadores e investigadores, sin embargo, no son sus rasgos físicos, sino ese temperamento férreo que marcó su derrotero.
Se casó muy joven en 1760, a los 15 años con José Gabriel Condorcanqui, Túpac Amaru II, uno de los próceres de la historia del Perú, en la iglesia de Nuestra Señora de la Purificación, en el pueblo de Surimana, lugar del curacazgo de su marido.
Madre de tres varones, Hipólito , Mariano y Fernando , Micaela Bastidas tuvo como primer maestro ideológico al propio José Gabriel, quien había adquirido una sobresaliente formación, tanto en el Cusco como en Lima, en múltiples reuniones, incluso ligadas a grupos masónicos[ en las que forjó su acendrado espíritu separatista.
La lideresa de las huestes tupa camaristas compartió con su marido, desde un inicio, los ideales de libertad, y aun discutió los planes estratégicos de la rebelión. Incluso parece haber sido más enérgica que el propio Túpac Amaru en cuanto a la disciplina de las tropas y la decisión de tomar el Cusco. Se sabe que su habilidad logística fue decisiva para obtener la victoria de Sangarará el 18 de noviembre de 1780. Sin embargo, la comprensión y el cariño entre ellos fue evidente, como se desprende del trato que Condorcanqui daba constantemente a Micaela, hasta en su correspondencia, llamándola con los diminutivos de "Mica" y "Micaco".
Fue capturada luego del fracaso de la sublevación, Micaela Bastidas fue ejecutada, sus verdugos le cortaron la lengua, le anudaron al cuello una cuerda que tiraron desde lados opuestos y, mientras agonizaba, la patearon en el vientre y en el pecho, en la Plaza de Armas del Cusco, el 18 de mayo de 1781, a los 36 años de edad, habiendo tenido antes que presenciar la ejecución de su hijo Hipólito y a la vista de su esposo



José Olaya

José Silverio Olaya Balandra fue un mártir en la lucha de la independencia peruana, nació en Chorrillos en el año de 1782.
En la lucha por la independencia de Perú, el prócer participó como emisario secreto llevando mensajes entre el gobierno (Callao) y los patriotas (Lima) a nado. Fue descubierto, apresado y sometido a tormento y condenado a muerte; a pesar de las torturas, nunca reveló su misión.
La independencia del Perú, declarada por primera vez en Huaura el mes de noviembre 1820 y el 28 de julio1821 en Lima, solamente se había hecho efectiva en Lima y en el norte; pero Cusco, la sierra central y el sur aún estaban bajo el dominio del ejército realista. Cuando José de San Martín reconoce el poco apoyo que le dan las fuerzas políticas y militares, renuncia ante el Congreso Constituyente de 1822. El congreso nombra como presidente de la República a José de la Riva Agüero y Sánchez Boquete y presidente del Congreso era, Francisco Javier de Luna Pizarro. El ejército realista, aprovechando que las tropas patriotas se encontraban lejos, toma Lima, obligando a los miembros del Congreso a refugiarse en el Castillo del Real Felipe en el Callao.
Es en este escenario, donde José Olaya, pescador de oficio, no dudó en servir de nexo entre las naves de la Escuadra Libertadora y los soldados de las fuerzas patriotas ubicadas en Lima, aunque eso significara recorrer campos y cruzar el mar nadando.
Apresado por el ejército realista, lo torturaron con el fin de obtener información sobre las fuerzas patriotas. José Olaya Balandra no se amilanó ante el dolor. Sufrió los 200 palazos que le aplicaron, no cediendo aún cuando le arrancaron las uñas.


JOSÉ GABRIEL Y NARVARTE

Nació en Huánuco el 18 de marzo de 1773. Fue hijo de don Salvador Aguilar, Español natural de la ciudad de Jerez de la Frontera, minero de profesión, y de doña Clara Narvarte, hija del Capitan don Juan Ignacio Narvarte, que fuera Corregidor, de Huánuco. También fue minero al igual que su padr, trotamundos y visionarios. Casi nada se conoce sobre su infancia de Aguilar. A los 14 años se aleja de la casa paterna y recorre el inmenso territorio del virreynato. Allí observó el trato inhumano a los indios mitayos, al extraer la plata de los profundos socavones. La realidad en que se vivía le permitió adquirir experiencia y formar su personalidad.Ya joven llegó hasta provincia de Mendoza, perteneciente al Virreinato del Río de la Plata. Aquí las gestes lo trataron muy bien y creyeron que era el nuevo Gabriel Túpac Amaru, y le incitaron a que fuera caudillo de una revolución política. A fines del siglo XVI se embarcó para España. Allí observó la corrupción del sistema de gobierno absolutista, desde donde se impartían las órdenes para la explotación de las colonias. Este conocimiento fue decisivo en los actos posteriores de su vida. Volvió a Perú y reanudó sus actividades de mineralogía. Se dirige a Recuay (Ancash), donde años atrás había descubierto unas minas, pero encontró que ahora ya tenían otro propietario, por lo que viajó a Lima en busca de su abogado, así conció a José Manuel Ubalde, quien se hizo su amigo.Después de su recorrido por la Selva donde estuvo preso en Chachapoyas acusado de espía, tuvo la noticia de que su amigo Ubalde había viajado al Cuzco. Aguilar, luego de volver a su tierra natal, atravesó la sierra central y llegó al Cuzco en 1804. Allí juntamente con Ubalde iniciaron la conspiración de liberar a nuestra patria del yugo español. Aguilar hizo su trabajo proselitista y llegó hasta La Paz, mientras que Ubalde y sus amigos lo hacían en el Cuzco. Para la revolución se requería la participación de un elemento militar, es por esa razón que comprometieron al Teniente de Granadero del Regimiento ;Paucartambo ;, Mariano Lechuga, amigo íntimo de Ubalde. Éste, participó en todas las reuniones. Cuando la insurgencia estaba a punto de estallar, el 25 de junio se presentó ante el Oidor Berriozábal y delato el plan. Debido que en esta traición, Ubalde y sus amigos fueron capturados en el Cuzco; mientras Aguilar, que preparaba el levantamiento fuera del Cuzco, fue capturado el 13 de julio de 1805 y encerrado en la prisión. El 5 de diciembre de 1805, a las 9:00 am. Fueron ahorcados en la Plaza Mayor del Cuzco.